Avance del capítulo 400 de ‘Sueños de libertad’ del miércoles, 24 de septiembre: Digna se marcha de casa

El episodio 400 de Sueños de libertad, que se emitirá este miércoles 24 de septiembre a las 15:45 horas en Antena 3, promete convertirse en un punto de inflexión en la historia. La confesión de Digna Vázquez sobre lo ocurrido con Jesús amenaza con desmoronar para siempre la relación de confianza que Damián de la Reina mantenía con ella. Lo que parecía una unión inquebrantable entre dos pilares de la familia Merino podría romperse sin remedio, y el futuro de Digna podría dirigirse directamente hacia la cárcel.

La tensión se palpaba ya en el capítulo anterior, emitido el martes. En él, Luz logró confirmar algo que llevaba tiempo inquietándola: María, en realidad, no podía caminar. Con esta revelación se disiparon por completo las sospechas que pesaban sobre Begoña, quien poco a poco empieza a entender que las apariencias en esta familia suelen ocultar verdades mucho más oscuras. Paralelamente, don Pedro tomó una decisión trascendental al nombrar a Tasio nuevo director de la fábrica. Fue Damián quien comunicó a todos los integrantes de la familia esta designación, gesto que generó diversas reacciones.

En medio de esta agitación, María expresó su agradecimiento a Gabriel. Reconoció que, al haberle inyectado aquella sustancia paralizante, le permitió mantener durante más tiempo la ilusión de que su plan todavía podía salir adelante, aunque la junta lo hubiera rechazado. Claudia, cargada de emociones, se sinceró con Manuela y le confesó que aquel paseo con Raúl había removido en ella el dolor de la muerte de Mateo, recuerdos que creía haber dejado atrás pero que continúan persiguiéndola.

La familia Merino, entretanto, encontró comprador para las tierras, lo que les permitirá afrontar la ampliación de capital antes de lo previsto. La noticia generó cierto alivio, aunque no disipó las tensiones internas. Tasio compartió con Carmen la inminencia de su nombramiento como director, y Begoña reconoció ante Luz que había estado ciega con respecto a María, igual que en su momento Andrés lo estuvo con Gabriel. Este reconocimiento marcó un momento de sinceridad y vulnerabilidad en medio de tantas intrigas.

La situación entre don Pedro y Digna escaló de manera peligrosa. Él la amenazó con revelar la verdad acerca de la muerte de Jesús, lo que provocó que ella se quebrara emocionalmente. Finalmente, incapaz de soportar la presión, Digna decidió confesarle a Damián su versión de los hechos. Esta revelación lo dejó atrapado en un dilema moral enorme: ¿denunciar a Digna, poniendo fin a su vida en libertad, o callar y convertirse en cómplice de un secreto demasiado oscuro?

En el adelanto del episodio 400, se muestra a Damián sumido en esa disyuntiva. Manuela, sin conocer aún la magnitud de lo que está ocurriendo, intenta consolarlo sin éxito. El peso de la verdad amenaza con aplastarlo. Mientras tanto, Gabriel recoge una carta de Isabel que parece contener información crucial, y al mismo tiempo recibe una inquietante llamada de don Pedro, quien nunca deja de mover sus hilos con fines ocultos.

Por otro lado, Tasio inicia su primer día como director de la fábrica. Aunque la inseguridad lo acompaña, cuenta con el apoyo de Carmen y Gaspar, que intentan infundirle la confianza necesaria para afrontar esta nueva etapa. Sin embargo, el cambio en la dirección despierta tensiones en el círculo familiar: Gema y Carmen perciben cierta incomodidad con el nuevo cargo de Tasio, pero Marta asume el papel de guía para ayudarlo a desempeñar su función.

Digna, por su parte, reúne a sus hijos y les confiesa que ya le ha contado a Damián la verdad sobre la muerte de Jesús. Esta revelación sacude los cimientos de la familia, dejando abierta la posibilidad de que la lealtad hacia ella se quiebre de manera definitiva. Mientras tanto, don Pedro busca manipular a Gabriel, envenenando sus pensamientos contra Damián. Para ello, utiliza el recuerdo de las cartas de su padre. Sin embargo, Gabriel mantiene una aparente indiferencia, aunque en su interior la duda comienza a crecer.

La tensión no se queda ahí. Gabriel sospecha cada vez más de María, aunque ella insiste en que no está alineada con don Pedro. Sus sospechas parecen confirmarse cuando encuentra las cartas de su padre en casa de Manuela, lo que lo deja profundamente conmovido. El peso de los recuerdos y el vínculo con su pasado se hacen presentes de forma abrumadora.

Paralelamente, Marta y Carmen trabajan en la organización de un evento para impulsar el proyecto “Pasión oculta”, un desafío empresarial y personal que también traerá consigo nuevas tensiones. Claudia, en un gesto de confianza, propone delegar en Gema parte de las responsabilidades, lo que abre la puerta a posibles fricciones en el futuro.

Por otro lado, don Pedro continúa con sus planes personales. Contacta con un notario para modificar su testamento, pero es interrumpido por Digna, quien le deja claro que ya habló con Damián y decide marcharse de casa. Esta decisión marca un antes y un después para la matriarca de los Merino, que ahora enfrenta un camino lleno de incertidumbre.

La historia gira en torno a una misma premisa: nada volverá a ser igual entre Damián de la Reina y Digna Vázquez. La confesión de ella sobre la muerte de Jesús no solo cambia el vínculo entre ambos, sino que amenaza con alterar para siempre el equilibrio en toda la familia. Lo que se avecina en este episodio 400 no es solo un nuevo capítulo, sino un momento clave que puede redefinir destinos, romper alianzas y quizás llevar a Digna tras las rejas.

En definitiva, el capítulo se presenta como un torbellino de emociones, traiciones y decisiones difíciles, en el que cada personaje tendrá que enfrentarse a sus propios demonios. Las mentiras, los secretos y las verdades largamente ocultas han salido a la luz, y ya nada podrá volver a ser como antes.